Gran novillada de Jandilla: Rubén Núñez vencedor del Camino

El mexicano se encuentra con el mejor lote y da una interesante versión; Juan Herrero también da una vuelta al ruedo y Chicharro malogra con la espada una notable faena

La final del Camino hacia Las Ventas congregó oleadas de gente joven. Había hasta pandillas de niños que correteaban por los pasillos y escaleras. Se guardó un minuto de silencio aunque no se anunció por megafonía. Probablemente dedicado a Gonzalo Conde ‘Gonzalito’ el eterno mozo de espadas de Curro Romero.

La final se la llevó Rubén Núñez. Un chico de Guadalajara (México) que lleva tres años en España. Alumno del CITAR. Se encontró dos novillos de bandera. Al que abrió la tarde lo espero de rodillas en el tercio. Juan Herrero se echó el capote a la espalda en un magnífico quite por gaoneras. El mexicano le plantó cara echándose de rodillas por caleserinas, levantó una fuerte ovación. Núñez brindó a su maestro, a Pedro Alonso. El novillo definió su humillación. Núñez lo entendió dejándole siempre puesta la muleta, en algunos momentos con más velocidad que poso por las ganas de agradar. Faena redonda, con buenos cambios de mano, que malogró con el acero perdiendo la posibilidad de oreja.

El cuarto, de cara gacha y cuajada presencia, fue un eral noble que descolgó también en el buen saludo capotero de Núñez. Toda la tarde estuvo muy variado con el capote. Brindó al público empezó de rodillas en el tercio con un cambiado y una ajustadísima arrucina todo ello de rodillas. La faena fue de menos a más pero el novillo mostró en todo momento gran clase. Núñez buscó la verticalidad y encontró en momento el poso y el ajuste que le podía haber faltado a la primera faena. Actuación importante que de nuevo la espada no le permitió redondear. En esta ocasión dio una vuelta al ruedo.

El representante de la escuela de Madrid fue Juan Herrero que además del buen quite por gaoneras citado resolvió muy bien durante toda la tarde. También dejó un buen quite en el cuarto. En los novillos de su turno se le vio suelto. Al parado segundo le buscó las vueltas para aprovechar el buen recorrido que tenía cuando se arrancaba. Con la espada no estuvo acertado. En el quinto firmó momentos de mucha calidad: firmó buenas verónicas de salida y lo llevó largo en la muleta. Los pases de pecho y alguna trincherilla fueron detalles muy valorados por el público. La espada, que quedó suelta, tardó en hacer efecto. Vuelta al ruedo.

Alejandro Chicharro llegaba como el favorito pese a ser el más nuevo de los tres. Sintió el apoyo de sus paisanos que le arroparon en todo momento. Entonado se mostró ante el manejable tercero, logró tandas de exigencia por abajo al novillo que rompió con buen fondo. El novillero de la escuela de Colmenar Viejo falló con los aceros. El sexto no le dio casi opciones, siendo el novillo más deslucido de los seis. Le faltó recorrido y Chicharro lo atosigó buscando el efecto deseado. Con la espada no lo vio claro.