Fieles a la nobleza que les suele caracterizar en las calles de Pamplona, los toros de Miura cerraron las carreras matinales en las calles de la vieja Iruña con un encierro limpio y sin generar momentos de peligro, en el que tan sólo hubo seis traslados por contusiones y un puntazo, leve, en la zona genital de un mozo.
Suya fue la segunda carrera más veloz de estas fiestas, repasa lo más detacado de este encierro del 14 de julio, con esta completa galería fotográfica:
FOTOGRAFÍAS: Diario de Navarra/Agencias.