La semana pasada se conocía que el segundo informe técnico sobre El Bibio estaba ya en manos del Ayuntamiento de Gijón. En él se advertía que el coso precisa de algunas obras de rehabilitación pero que en ningún caso peligra la seguridad de los espectadores si se celebrarse un espectáculo.
Según informa el diario El Comercio, en dicha reforma del graderío, El Bibio sufriría una reducción de su aforo en 800 localidades. Esto supone que pasaría a tener una capacidad para 7.600 personas, es decir, un 9,5% menos.
En este sentido, se afirma en el documento que «es notorio que el estado actual de las gradas, por las ondulaciones y quiebros puntuales existentes en ellas, tiene que ser reformado para que el uso del edificio para espectáculos públicos cumpla con las exigencias básicas relativas a la seguridad y a la habitabilidad en la medida en que la protección del edificio lo permita».
Por otra parte, en el informe se manifiesta que para una mejor optimización del espacio arquitectónico estudiar «la implantación de otros usos posibles, explorando las posibilidades de financiación de los fondos europeos». En este sentido, el Consistorio ya se había referido a ello con la intención de acceder a los fondos FEDER, cuya solicitud a ellos finaliza este mismo jueves.
