Este miércoles ha fallecido el empresario y apoderado Roberto Espinosa a los 84 años en la localidad castellonense de Vinaroz. Espinosa, que no pudo superar una enfermedad que se había agravado en los últimos meses, también fue novillero en sus primeros pasos dentro del mundo del toro.
Sin embargo, su faceta más relevante en el orbe taurino fue como empresario plazas de primer orden -incluso trabajó en el equipo anterior de la plaza de Las Ventas- y apoderado de toreros contrastados en el circuito de ferias. Así, la lista de toreros que tuvo a su cargo es extensa: Curro Caro, Emilio Muñoz, Manuel Montoliú, Dámaso González, Luis Francisco Esplá, Juan Carlos Vera, Dávila Miura, Rafaelillo, Rubén Pinar, López Chaves.
Nacido en Barcelona en 1938, Roberto Espinosa Cantó era hijo de un popular novillero de los años 20 que fue quien le inculcó la afición que le llevó a debutar en público, con solo 14 años, en un festival celebrado en Mataró.
Al no tener aún cumplidos los 16 años exigidos para actuar de manera profesional, vivió y toreó durante dos temporadas en el sur de Francia, hasta que por fin logró actuar en la madrileña plaza de Vistalegre en 1954.
Roberto Espinosa basó su carrera fundamentalmente en los abundantes festejos que se celebraban entonces en toda Cataluña, en plazas como las gerundeses de Figueras, Lloret de Mar, San Feliú de Guixols, Olot y la propia capital, además de las de Tarragona y Tortosa y las dos que se alternaban en Barcelona, la Monumental y la de Las Arenas, donde tuvo especial cartel por su toreo de calidad.
Sin llegar a tomar la alternativa, Espinosa se retiró pronto del toreo activo para dedicarse a labores de apoderamiento, empezando con su paisano Enrique Patón, que luego, junto al también torero francés Simón Casas, sería su socio en grandes proyectos empresariales en las plazas de toros de Valencia, Castellón o Nimes.
Desde todo el equipo que lleva a cabo Toreteate, queremos trasladar nuestro pésame a toda la familia y amigos por tan sensible pérdida.
