La Feria de la Virgen de los Llanos ha echado el cierre por todo lo alto. Los toreros de la tierra, Rubén Pinar y Sergio Serrano, que se batian en duelo en un mano a mano, han salido por Puerta Grande. La corrida de Victorino Martín, ha tenido dos toros destacados, que se han lidiado en tercer y cuarto lugar, siendo este último premiado con la vuelta al ruedo.
Sergio Serrano quiso reivindicar su triunfo en la tarde de ayer. Se fue a recibir al primero de su lote a portagayola. Construyó una faena importante en la que solventó todos los problemas que le planteó el la «A coranada». No tenía excesivo recorrido, pero logró a base mando pronlongar la embesida, plasmando muletazos templados y de mano baja. La espada le privó de cortar oreja.
Bravo y con gran fondo, «Playero» de Victorino Martín, que hizo buena pelea en varas. Serrano realizó una faena cumbre. El albaceteño dibujó muletazos de de bello trazo con profundidad, temple y estética. Ligó series por ambos pitones, expresando su concepto. La plaza se puso en pie cuando se fue a por la espada. Tras ella se volcó, siendo prendido de feamanera. Cortó las dos orejas y el toro fue premiado con la vuelta al ruedo. El torero, pasó a la enfermería después de dar la vuelta al ruedo.
Salió de la enfermería Sergio Serrano para lidiar al sexto. Repitió la hazaña del segundo, al irse a esperarlo a la puerta de chiqueros, siendo casi arrollado. El de Victorino tuvo peligro y nunca fue entregado en las telas. Expuso mucho el albaceteño, pero nunca dio un paso atrás. Acabó con él de media estocada y, aunque hubo petición, el palco no estimo oportuno conceder otro trofeo. Dio una vuelta al ruedo.
Abrió la tarde un «Victorino» serio y con trapío, con el que Rubén Pinar se la jugó por momentos. Un toro complicado, que nunca fue metido en la muleta. El albaceteño le puso empeño para que empujara hacia adelante. Dejó dos pinchazos previos a la estocada, pero fue ovacionado por el gran esfuerzo.
Hizo tercero un gran toro de Victorino Martín. Demostró en las telas de Pinar tener clase y humillación, cuajándolo de principio a fin. Lo condujo con ligazón por el pitón derecho, componiendo la figura. Hubo series de nota. Se astacó con la espada y solo paseó una oreja.
El quinto tuvo muchas teclas, pero se encontró con Rubén Pinar, que con firmeza y entrega logró arrancarle una oreja. Los defectos se fueron acrecentando conforme se sentía más podido, acortando el recorrido. El albaceteño volvió a jugársela en los terrenos de cercanías.
Plaza de toros de La Chata, en Albacete. Última de la Feria de la Virgen de los Llanos. Tres cuartos de entrada. Toros de Victorino Martín, el cuarto de nombre «Playero», fue premiado con la vuelta al ruedo.
Rubén Pinar (de blanco y plata), ovación con saludos, oreja y oreja.
Sergio Serrano (de caña y oro), ovación con saludos, dos orejas y vuelta tras petición.