Emilio de Justo firmó una importante tarde en el cierre de la Feria de San Cristóbal al cortar tres orejas. Sus compañeros de cartel Marcos Peña “El Pino” y Francisco de Manuel pasearon un apéndice cada uno. El encierro inicialmente reseñado de Juan Bernardo Caicedo fue sustituido por otro del hierro de Juan Campolargo de buen juego en general, a excepción del sexto.
Emilio de Justo se mostró por encima del segundo, que a base de técnica y dominio de los terrenos terminó sometiéndolo. Plasmó muletazos por ambos pitones cargados de despaciosidad y bello trazo. Tras una buena estocada paseó las dos orejas. El quinto, un toro encastado que fue premiado con la vuelta al ruedo. El extremeño extrajo naturales de gran profundidad y ligazón. Sentenció con una estocada y un descabello y obtuvo otro apéndice.
Abrió plaza un astado de poco recorrido con el que Marcos Peña “El Pino” no pasó de voluntarioso. Un trofeo paseó del cuarto, un toro noble con el que construyó una labor intermitente.
Francisco de Manuel se presentó en San Cristóbal con el peor lote del encierro. Su primero fue un deslucido y al cierra plaza le faltó recorrido. Con este último hizo un esfuerzo que remató con una buena estocada y cortó un apéndice.
Plaza de toros Monumental «Hugo Domingo Molina» de San Cristóbal (Venezuela). Último festejo de la Feria de San Sebastián. Media entrada. Toros de Juan Campolargo, el quinto premiado con la vuelta al ruedo.
Marcos Peña “El Pino”, ovación y oreja.
Emilio de Justo, dos orejas y oreja.
Francisco de Manuel, ovación y oreja.