La Corrida Blanca que daba el pistoletazo de salida a la Feria de Bayona se saldó con Talavante y Rufo paseando las dos únicas orejas del festejo. Fue el toledano el que dejó una faena para el recuerdo con el cierraplazas.
Alejandro Talavante se encontró con un primer «Mayalde» que tuvo motor y calidad. El extremeño dejó pasajes al natural con encaje y ligazón. A pesar de ello, la faena no gozó de contundencia y tuvo altibajos. Culminó con un estocadón y paseó una oreja.
Con el quinto, no pudo rematar el triunfo con un quinto rajado con el que no pudo hacer nada. Antes, se vivieron momentos angustiosos en el tercio de banderillas, donde El Fini y Fernando Sánchez fueron volteados.
Tomás Rufo cuidó en sus telas al tercero, que quedó muy mermado tras una costalada en el primer tercio. Estuvo muy asentado, conduciéndolo con suavidad pero no pudo redondear por las condiciones de su oponente. Sí cinceló una serie al natural de alta nota.
Al último le hizo la faena de la tarde, premiada con una oreja. Rufo se encontró con un astado que embistió con suavidad y ritmo. Anduvo con una gran seguridad, toreando con cadencia y acompañando con la cintura. Otra vez, los mejores pasajes llegaron con la zurda.
Abrió la tarde un buen toro de Conde de Mayalde al que López Chaves recibió con una larga cambiada. Fue bravo en su encuentro con el caballo. «Descreído» tuvo clase y fijeza. El salmantino compuso una labor destacada pro el pitón derecho. Por el izquierdo, no fue igual el trato. Dejó detalles pero le faltó continuidad. Saludó tras la estocada.
Domingo se topó un cuarto con genio que tuvo muchas teclas. Intentó estar resolutivo pero no terminó de acoplarse a la embestida ni las exigencias que le planteó el de Conde de Mayalde.
Plaza de toros de las Arenas de Bayona . Corrida Blanca. Más de media entrada. Toros de Conde de Mayalde, bien presentados y desiguales de juego.
López Chaves, ovación con saludos y ovación.
Alejandro Talavante (de nazareno y oro), oreja y silencio.
Tomás Rufo, ovación con saludos y oreja.