Juan García «Mondeño» ha fallecido este jueves en Sanlúcar la Mayor. Fue un matador de toros con una personalidad arrolladora, portador de un toreo de valor y vertical al que siempre le rodeó el misticismo.
En el apogeo de su carrera, sintió la llamada de Dios y decidió ingresar en el convento burgalés de dominicos de Caraluega en 1963, tomando los hábitos un año más tarde. Su vocación por la Tauromaquia siempre estuvo presente por lo que salió de la orden religiosa año y medio después.
A continuación, pueden ver un breve documental en el que se resume su peculiar forma de vivir y sentir el toreo: