El novillero Álvaro Alarcón fue cogido de fea manera por el complicado segundo, por lo que, tras darle muerte, pasó a la enfermería para ser atendido por ‘una cornada en la cara interna del muslo derecho de 15 centímetros, que afecta a tejido subcutáneo y aponeurosis muscular, así como de un puntazo en región cervical derecha’.
Su pronóstico es ‘leve‘, según el parte firmado por el doctor García Padrós. Estas lesiones no le han impedido salir a matar a sus otros dos novillos de Fuente Ymbro, ya que se corrió turno y su compañero de cartel, Víctor Hernández, mató tercero y cuarto consecutivamente para después regresar al ruedo el novillero de Torrijos.
A continuación, puede ver la secuencia del percance: